CAMPAÑA POR LA PENSIÓN DEL ESCRITOR
Las comisiones de Presupuesto y Cultura de la Legislatura porteña tratarán en la primera semana de septiembre el proyecto de ley de Pensión para los Escritores, iniciativa que expresa un viejo anhelo de los creadores literarios y que ya cuenta con las firmas de más de 500 escritoras y escritores de distintos distritos del país.De todas formas, atendiendo a un criterio primario que no llega a presentarrasgos de mercenarismo artístico, la intentona de tan modernosa patota culturalno incluye la discusión de factores de inclusión por acción, jerarquización, aporteu obra que determine gradación o escala de beneficiarios de la pretendida legislación.
En la reunión fue aprobado por unanimidad un plan de acción para difundir y explicitar los alcances del proyecto entre los legisladores y ante la opinión pública.El proyecto, presentado en el ámbito local en el año 2007 por el diputado Elvio Vitali, fue ratificado este sábado por más de cien escritores en la Asamblea Extraordinaria que presidió el poeta Wenceslao Maldonado.Jorge Luis Borges se acogió a los beneficios legales de una jubilación de escritor, de régimen común, con base de aportes legales y fehacientes acordes a su trascendente y comercialmente exitosa obra, en tanto que durante el gobierno del ex presidente Carlos S. Menem le fue otorgada una pensión graciable a Ernesto Sabato, quien con todas sus críticas y discrepancias con el primer magistrado de la Nación, aceptó y cobró puntualmente sus ingresos que algunos declararon injustificados.Leonor Calvera, Noé Jitrik, Tununa Mercado, Alberto Daneri, Diana Bellessi y José Luis Mangieri, entre otros escritores, coincidieron en destacar el valor del proyecto y en considerar que tras su aprobación en la ciudad de Buenos Aires se abrirá el camino para convertir la Pensión del Escritor en una ley nacional que dignificará el oficio.Desde sus palacios de cristal, escritores de todo el país observan la situación en la Capital Federal. Intuyen que si los resultados son positivos, puede ser el comienzo de un efecto cascada que incluya la actividad en el marco legal propicio para el reconocimiento económico preciso que permita el desarrollo de la actividad creativa con rentabilidad propia. "La cultura es la columna vertebral de una sociedad -se lee en los fundamentos del proyecto, redactados por el fallecido Elvio Vitali- y lo que permanece de ella son las obras. El sello de sus creadores constituye la idiosincrasia de un pueblo. No hay futuro si se abandona a quienes abonan con su arte el destino común".